domingo, 15 de enero de 2012

Juegos

La verdad… es que nos pasamos la vida jugando. De pequeños nuestros juguetes eran: una pelota, una muñeca, un coche de carreras o un playmobil o incluso jugábamos a ser otra persona: piratas, indios, polis y cacos... Conforme pasan los años esos juguetes se transforman en otras cosas y en otro tipo de juegos. Jugamos con las personas, jugamos con nuestra vida, jugamos con las decisiones que marcan nuestra existencia, jugamos a ser felices y sobre todo jugamos con nosotros mismos.

A menudo nos engañamos pensando que los juegos son solo eso, una forma de divertirnos, pero ¿qué pasa cuándo la diversión es a costa de otros, cuándo solo te diviertes tú y no los demás o viceversa?

Los juegos siempre me han gustado, pero llega un momento en el que te das cuenta de que llevas tanto tiempo jugando en tu vida, que te cansas...